En contacto con Panamericana, el abogado y analista Carlos Bohrt, formuló consideraciones sobre el informe de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), sobre las ejecuciones extrajudiciales en el Hotel Las Américas de Santa Cruz durante el año 2009 y el nivel de responsabilidad sobre las máximas autoridades de estado de aquel entonces.
El jurista recalcó que si el actual gobierno de Luis Arce no abre una investigación objetiva e imparcial de los hechos observados, el caso será tratado en la corte penal internacional con serias consecuencias tomando en cuenta antecedentes de similares características.
Bohrt anticipó efectos jurídicos y políticos de la exhortación de la CIDH a investigar las graves violaciones a derechos humanos por el caso terrorismo, así como las reacciones que podrían registrarse.
Sobre este aspecto, identificó nuevos elementos para desestimar la existencia del “plan negro” denunciado por Morales en vista de las revelaciones.
Acerca del impacto político, el exparlamentario desahució las aspiraciones de Evo Morales con miras a las próximas elecciones y reafirmó la previsión de realineamiento al interior del Movimiento al Socialismo.
Sobre el tema y sus repercusiones, el politólogo, Franklin Pareja aseveró que el presidente Arce deberá tomar una decisión firme y no permitir que a título de defensa de la soberanía, el estado ignore recomendaciones internacionales sobre el cumplimiento de tratados suscritos.
Además, coincidió en sentido de que la asociación que hace Evo Morales de los acontecimientos con un plan en su contra, es deshonesta y forzada.
Pareja opinó que lo más saludable en el actual escenario sería que el jefe del estado Luis Arce active mecanismos de investigación haciendo eco de las exhortaciones internacionales como corresponde, puesto que la simple negación no implicaría la resolución del tema.
PANAMERICANA.
