Panamericana recogió impresiones diversas en torno a los planteamientos del jefe del estado, Luis Arce Catacora, debido a que implican un análisis complejo a nivel económico, social y político.
Por ejemplo, para el expresidente, Jorge Quiroga, la alocución de Arce no representa una verdadera propuesta para paliar la crisis, sino una maniobra de un gobierno acorralado y débil, según percibe.
Para el analista Franklin Pareja, en el plano político es evidente el interés del denominado “arcismo” para evitar la eventual candidatura presidencial de Evo Morales, frente a una profunda crisis institucional en el Tribunal Constitucional.
A juicio del politólogo Marcelo Arequipa, existió una fuerte presión sobre el primer mandatario para proponer soluciones a las problemáticas del país, y su respuesta fue optar por la toma de decisiones compartidas en lugar de aplicar una política vertical e impositiva.
Profundizando en el impacto político del discurso, el abogado constitucionalista Luis Alberto Ruiz, opinó que el más afectado por las proyecciones de Arce es el líder del MAS, Evo Morales. Sobre este punto, advirtió que el presidente habría acelerado el proceso de lucha interna en el partido de gobierno.
En el aspecto financiero, el presidente del Colegio de Economistas de Tarija, Fernando Romero, ponderó la señal positiva que supone una convocatoria al consenso con sectores productivos y empresariales, acotando que debe evitarse una crisis en la balanza de pagos, pues ello constituiría una devaluación oficial.
Asimismo, el economista, Martin Moreira, citó al presidente Arce para asegurar que el gobierno no tomará determinaciones perjudiciales para la población, y en tal sentido descartó el escenario de devaluación avizorando más bien un contexto de diálogo y mejoras en las normas regulatorias.
Por su parte, el diputado de la alianza Comunidad Ciudadana, Juan José Torrez, formuló consideraciones referidas a la distribución de escaños y expresó preocupación puesto que en su criterio el primer mandatario abordó temáticas que no son de su competencia.
También el ex
presidente de la Cámara Boliviana de Transporte, Gustavo Rivadeneyra, compartió impresiones y mostró extrañeza por el planteamiento de un referéndum sobre la subvención a los hidrocarburos, dado que genera susceptibilidades sobre las políticas económicas que proyecta el gobierno.
Sin embargo, el viceministro de Industrialización, Comercialización, Transporte y Almacenaje de Hidrocarburos, Adams Hurtado, se mostró confiado en los planes gubernamentales y a tiempo de rechazar críticas, justificó la decisión de convocar a una consulta ciudadana para que sea la población la que decida el destino de sus recursos.
Además, la autoridad del Ministerio de Hidrocarburos desestimó versiones de que se habría impuesto una suerte de “gasolinazo encubierto”.
Por último, la Ministra de Salud, María Renee Castro, vinculó el contenido del discurso presidencial con el ámbito sanitario y corroboró que la gestión de Luis Arce apunta a atender las necesidades integrales de los bolivianos.
PANAMERICANA.
