Sin embargo, aclaró que la decisión no se tomó de forma repentina, sino que se otorgó un plazo prudente para que las autoridades de estado proporcionen una explicación técnica, petición que no fue atendida oportunamente.
Larach, afirmó que los movilizados contemplan la posibilidad de que grupos de choque afines al MAS pretendan generar conflicto, por lo que la entidad cívica exhorta a los ciudadanos en protesta a evitar caer en provocaciones.
Además, subrayó que a pesar de la cercanía del fin de semana, el comité aún guarda esperanza de que el gobierno de Luis Arce propicie un escenario de diálogo que deje sin efecto el cese de actividades.
De su lado, el diputado del MAS Ányelo Céspedes, quien es además representante del departamento de Santa Cruz, lamentó la convocatoria al paro y la atribuyó directamente al gobernador Luis Fernando Camacho en afanes, dice, de desestabilizar al gobierno de Arce.
El parlamentario emplazó a la autoridad regional a deponer actitudes de confrontación y amedrentamiento para imponer la medida de presión entre ciudadanos que rechazan el potencial perjuicio.
Céspedes, aseveró que la oposición en Bolivia insiste en consumar un nuevo golpe de estado y en esta línea repudió actitudes de chantaje para obstaculizar la eventual realización del censo.
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