La decisión de la Cámara Boliviana de Transporte Nacional e Internacional de convocar a bloqueos carreteros los días 3 y 4 de junio exigiendo varias demandas al gobierno central, continúa generando sospechas de intenciones políticas entre autoridades estatales.
Por ejemplo, el gerente de logística de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos, Félix Cruz, explicó a Panamericana que la situación de sobredemanda de combustible se debe a procesos especulativos iniciados en redes sociales, por parte de actores políticos interesados en crear temor entre la ciudadanía.
El funcionario agregó además que al contexto complicado se suman la administración deficiente de algunas estaciones de servicio y el desvío de grandes volúmenes de producto en camiones cisterna involucrados en actividades ilícitas.
Similar evaluación fue compartida por el director de la Agencia Nacional de Hidrocarburos, Germán Jiménez, quien confirmó la programación de un encuentro con representantes de la Asociación de Surtidores del país a fin de coordinar un trabajo más estrecho y eficiente.
Al margen de garantizar distribución regular de combustible para el mercado interno, Jiménez coincidió en apuntar al pánico y a organizaciones delictivas como responsables por la demanda inusual que se reporta.
Sin embargo, las versiones anteriores fueron desmentidas por el dirigente de la Federación de Transporte Nacional e Internacional de Santa Cruz, Juan Yujra, para quien el gobierno pretende disfrazar la realidad y desoír peticiones de acercamiento, de modo que los intermediarios han perdido credibilidad y ahora los movilizados exigen la intervención del presidente Luis Arce.
Si bien admitió que el bloqueo de caminos podría resultar contraproducente, Yujra afirmó que se trata de la única opción para obtener respuestas sostenibles.
PANAMERICANA.
