jueves. 28.03.2024

En esta jornada, habrá que incorporar a las reflexiones sobre la situación nacional, ciertos elementos nuevos en la perspectiva de entender, de alguna manera, lo que está ocurriendo en el país tras el reciente conflicto político y social.

Como se conoce, la Organización de Estados Americanos, ha entregado al gobierno de la Presidenta Jeanine Añez, el informe final de la auditoría sobre al proceso electoral del pasado 20 de octubre.

En este contexto, se ha conocido que se ratifica las irregularidades que se había anunciado en el informe preliminar de la madrugada del pasado 10 de noviembre,  misma fecha en la que renunció Evo Morales, junto a Álvaro García.

Según algunos alcances del informe final se establece que se pudo identificar una línea de conducta en la manipulación, falsificación y adulteración en el llenado de actas electorales, a través de mecanismos bastante similares en distintas regiones en nuestro país; incluso se ha mencionado que un solo puño habría llenado varias actas por ejemplo.

Algunos entendidos en la materia, ya han formulado algunas consideraciones y surgieron aseveraciones firmes al momento de referirse al tema, y por ejemplo se dijo que hubo una "manipulación dolosa" en dos líneas de conducta.

Una es la falsificación de datos y firmas en el llenado de actas, y la otra es a nivel del procesamiento mismo de los resultados, más aún tomando en cuenta el flujo de datos a dos servidores ocultos, que no eran controlados por personal del TSE, permitiéndose de esta manera la manipulación y suplantación de actas, según lo manifestado.

Las reacciones de los líderes políticos, no se dejaron esperar y por ejemplo se utilizaban calificativos bastante firmes respecto al informe de la OEA con términos como “devastador”, para referirse a los alcances del documento.

Otros protagonistas de la noticia, también han adelantado que este informe sería lapidario, sobre todo a nivel internacional, pues se estaría desbaratando la tesis que han dado a conocer Evo Morales y sus seguidores, en sentido de que en el país se habría producido un golpe de estado.

En este sentido, se dijo que la comunidad internacional, entendería recién lo que realmente sucedió en Bolivia, con un fraude monumental propiciado por el Movimiento Al Socialismo.                  

Incluso, se ha llegado a mencionar que en México se tendría que reflexionar sobre la protección que se está brindando al ex – Presidente Evo Morales, por lo que tendrían que restarle el apoyo que se le otorga actualmente.

Pero no sólo este elemento se presenta en el escenario actual, dado que existen otros aspectos que deben ser considerados en esta coyuntura, como son los aprestos electorales que impulsan protagonistas políticos, con vistas a los siguientes comicios generales.

Ya Luis Fernando Camacho, Marco Pumari, Carlos Mesa y Chi Yung Chung, estarían en plena carrera electoral, por lo que no serían  casuales algunos estudios que se han presentado recientemente.

En este contexto, se ha cuestionado el hecho de que las organizaciones políticas con personería jurídica, estén asumiendo una actitud poco decorosa al ofrecer sus siglas a personajes cuya opción electoral es interesante.

En todo caso, se ha mencionado que todas las acciones y consideraciones tendrán que ser propiciadas desde un punto de vista del respeto a la democracia y las normas imperantes, priorizando el voto en las urnas y evitando sucesos como los ocurridos luego del 21 de febrero de 2016, cuando se desconocía precisamente la voluntad popular.